Hoy fui a ver Planet 51.
Y no me arrepiento. Es de estas películas de dibujos animados que valen tanto para niños como para los adultos, igual que Wall-E por ejemplo.
En Planet 51 tenemos una muy buena sátira de la actitud xenofóbica. Aunque en la peli se refiere a la locura OVNI de los años '50, se puede extrapolar muy bien a ciertas actitudes típicas de nuestros días. Como en las buenas sátiras, al darle la vuelta al tópico general se ridiculiza por completo.
El dibujo está muy logrado, en especial las escenas espaciales. Los personajes me parecen creíbles, sobre todo el general paranoico y el científico loco, el más malvado de todos.
La música, muy a los años '50... aunque la perversión de considerar la Macarena como una tortura es un guiño divertido a los tiempos actuales.
Me encanta el detalle de que haya que recurrir a los pacifistas hippies para salvar al protagonista.
Para los niños, dos personajes muy simpáticos, y paralelos en cierto modo: el perro-alien y, sobre todo, el robot Rover, con su curiosa fijación (defecto de programación, sin duda) por las piedras y su habilidad para escaparse de cualquier sitio.
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